Es impresionante saber que más de 1 millón de niños mueren cada año por falta de oxígeno al nacer, y es aún más frustrante conocer que casi el 100% de ellos, proviene de clases sociales menos favorecidas, incluso de naciones del Primer Mundo.

Tras leer esto nos preguntamos: existiendo miles de avances en el campo de las tecnologías móviles, ¿no podremos también conocer una invención que reduzca estas cifras y salve vidas? Quizás fue con esta misma pregunta que, Kanga, ha llegado a la industria médica.

Una esperanza para el más indefenso

De entre las enfermedades neonatales, podemos decir que la mayoría de ellas cumple al menos dos características: la primera: son impredecibles; y la segunda: casi nunca se puede hacer nada por controlarlas una vez suceden. No obstante, los números son alarmantes y con el paso de los años siguen creciendo de una forma tan desmedida que, los grandes diseñadores, se ocuparon al fin del asunto e hicieron algo por resolverlo.

Y la mente detrás de Kanga es Darja Wendel, quien de la mano de Laerdal Global Health desarrolló un interesante sistema que solo consta de una cuna de apoyo y una manta transparente, pero que logra hacer las veces de todo un «arsenal» médico, y con ello mejorar rápidamente el funcionamiento respiratorio del menor que nace con complicaciones. Esto se logra sin tener que separar al pequeño de su madre y gracias a la luz que proporciona retroalimentación e indica cuándo y por cuánto tiempo se debe proceder a la ventilación.

El kit es solo el ápice de una revolución científica y médica que cada vez abarca más ámbitos e intenta a disminuir el sufrimiento. Incluso se asegura que los índices de mortalidad podrían reducirse hasta en un 16% por cada 30 segundos (menos) en el tiempo de ventilación.

Pero ante todo, y vale la pena resaltarlo, los mismos desarrolladores están apostando por la formación continúa y profesional en lugares donde los recursos no abundan y el acceso de personal es más difícil.

Es bueno ver como en un mundo colapsado por las pujas de multinacionales y sus invenciones móviles, hay quienes se preocupan por la integridad de quienes menos tienen y más en regiones apartadas que no gozan de los privilegios de los avances constantes.