Una de las prácticas más extendidas de los últimos años, y que sirve como indicador de la buena salud que goza el mercado de los sitios web, es la compra / venta de proyectos web. Muchos desarrolladores han encontrado una veta de negocio con muy buenos resultados: vender un dominio ya establecido, para que otra persona lo siga explotando.

El objetivo es vender un proyecto de diseño web a un cliente, convencerlo de que lo que creamos tiene suficiente calidad y que le puede resultar útil de acuerdo a las necesidades que cada negocio tiene de acuerdo al sector del mercado en el que se desarrolle.

Los profesionales del desarrollo web y las plataformas SEO saben que un buen proyecto se vende solo, pero requiere características muy específicas: tiene que estar bien diseñado, ser eficiente y adecuado para el tipo de usuario que va a quedar a cargo de mantener vigente y actualizado el contenido web.

La práctica extendida: venta de proyectos web

En Internet encontraremos toda clase de proyectos web que se venden. Hay dos tipos muy importantes, sitios nuevos o sitios prestigiosos que se venden para cambiar de manos. Dependiendo del tipo de negocio o sitio web que deseemos llevar adelante, puede que nos resulte más económico crear desde cero un proyecto web, contactar a un desarrollador y llevar a cabo un proyecto personalizado de acuerdo a nuestras necesidades.

En otros casos, a veces un sitio web prestigioso y que ya tiene un número de lectores y visitantes regulares, puede tener un valor elevado pero económico desde el punto de vista de la ubicación, ya que al ser un sitio conocido no tendremos que hacer tantos pasos de publicidad para hacerlo conocido.