El espionaje a usuarios de teléfonos móviles mediante apps está en boca de todos luego de que se confirmará que hay aplicaciones utilizando la tecnología ultrasonido de SilverPush sin consentimiento. Se trata de una tecnología creada en 2005 que generó polémica porque podía ser utilizada para espiar la cotidianeidad de los usuarios.

Aplicaciones espía en el móvil mediante ultrasonido SilverPush.

En definitiva, lo que hace esta tecnología es escuchar frecuencias entre los 18 y 20 kHz y de esta forma registrar si estamos viendo algún video o anuncio publicitario sobre un producto en particular. A partir de eso las aplicaciones nos van inundando con publicidad específica sobre los temas que nos interesan, pero no hay un consentimiento previo a que analicen nuestras conductas diarias frente a los medios.

Además del uso publicitario, la tecnología ultrasonido se puede utilizar también para detectar la ubicación en almacenes o supermercados sin necesidad de activar el GPS. Para evitar el espionaje encubierto de estas aplicaciones los usuarios de Android 6.0 pueden desactivar el acceso al micrófono de las apps espías. No se garantiza el fin del espionaje, pero por lo menos dificulta la recolección de algunos datos.

Lo que más sorprende es que hay cientos de apps que utilizan esta tecnología y algunas han sido desarrolladas por marcas de reconocimiento internacional como McDonalds y Krispy Kreme. El avance del espionaje publicitario parece haber seguido de forma encubierta desde 2005, año en que el caso SilverPush despertó la polémica. Hoy Google y otras empresas de seguridad tienen problemas para detener el avance de estas técnicas de espionaje, pero es fundamental tomar medidas para evitar que pase a mayores.